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"Nada podemos esperar sino de nosotros mismos"   SURda

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20-05-2011

 

 

 

 

El “pueblo en armas” no fue el ejercito nacional o, ESTE, 18 de Mayo.

SURda

 

Nuestra opinión

Las víctimas y los deudos, estamos aquí y seguiremos luchando. De eso no le quepa la menor duda. Nos mueve la justeza de nuestra causa. Nos estimula la cobardía manifiesta de los imputados. La desidia vergonzosa del gobierno. La complicidad de sus estructuras partidarias, de los falsos líderes de las fracciones que son unos verdaderos traidores a la causa que los llevó a los sitiales que ocupan.

 

Ni el “pueblo en armas”, ni la “admirable alarma” fueron hechos protagonizados por las fuerzas armadas. Los Blandengues es necesario recordarlo eran una especie de policía de fronteras cuyo cometido era la represión del contrabando. Para integrarlo le dieron al antiguo contrabandista Artigas, uno de los tantos jóvenes patricios que no tenía alternativa- y por eso se volvió contra el poder colonial dominante- un puesto. Debía –como todos -aportar sus cinco caballos y su voluntad y coraje que se descontaba por sus antecedentes familiares.

Después vino la epopeya heroica que él acaudillo. Digámoslo en estos momentos cuando el “patrioterismo” esta en boga y agreguemos que el patrioterismo es esencialmente –no solo en Uruguay- una entelequia reaccionaria. Nadie hoy día podrá reproducir los sentimientos de los paisanos y paisanas que eran la mayoría de la población de aquella Banda Oriental vieja, cuando la mayoría de su población habitaba los campos.

El Uruguay actual, ese fenómeno particularmente urbano, es otra cosa. La antigua factoría diseñada por Lord Ponsomby no quedó reducida a un enclave portuario y los depósitos de mercadería con un “campo” detrás. Para bien o para mal es otra cosa de aquella pensada originariamente. Carlos Real de Azúa, en un libro póstumo (pensado y escrito durante la tiranía militar y el Terror de Estado) ha dejado un testimonio bien claro del asunto en el que cada puntada conceptual no se dio sin nudo.

Fue el patrioterismo, una corriente en Uruguay inventada por la burguesía portuaria cuando les convino. En los tiempos de la Patria Vieja, al “guaderio” se le perseguía. Cuando convino se le santificó. Ahí esta el “Gaucho” en pleno centro, trastocado en su friso al pie, con arado. Un verdadero dislate de nuestra burguesía dependiente. Pero las clases dominantes necesitan crear sus mitos, postergarse a través de ellos, asegurar con los mismos la dominación ideológica que necesitan.

Cuando no lo pueden lograr por medios pacíficos, por la aceptación resignada general, emplean la fuerza bruta. El ejército nacional, empezó siendo eso: el depósito en el cual se disciplinaba a garrote limpio al paisanaje que corrían los estancieros de los campos alambrados. Se acaba la estancia con los “agregados” y empezaba la incipiente industria capitalista de la carne de exportación. Latorre fue protagonista principal y por eso el “latorrismo” se intentó reivindicar por los mandamases de uniforme del Terrorismo de Estado. Sobre aquel clima cuartelero, León de Palleja (que después cayo en Paraguay) ha dejado sus observaciones. Y en el cuerpo de oficiales se refugiaban hijos calaveras de estancieros, de comisarios de políca o de pulperos que se habían desgraciado –aunque sabían leer y escribir un poco- para salvarse y no convertirse en prófugos de la justicia. El resto lo aportaban los inmigrantes (León de Palleja, era uno de ellos), militares de escuela a los que de alguna manera se les había acabado la carrera en sus países de orígenes.

La burguesía portuaria (el alto comercio) odiaba a muerte a los rebeldes paisanos y paisanas. Los notables que le servían (abogados y escribanos) también. Cuando lograron provocar “la redota “cimiento base de nuestra identidad mandaron inmediatamente las partidas “tranquilizadoras” que hicieron el mismo Terrorismo con los civiles que se practicó después.

Recibieron a Otorgués y sus gauchos desarrapados con desconfianza. Cuando pudieron conspiraron primero para que les pusieran un Barreiro y después a un Rivera. Del campo profundo venía “la peste anarquista” que engendraba el mismo sistema. Los que aspiraban a todo lo que les estaba negado. Por eso Artigas creó “Purificación” a ver si todos los altos contrabandistas del comercio de la plaza, los leguleyos que le servián y los estancieros latifundistas se corregían y se hacían verdaderos patriotas. Porque orientales eran. Justamente eran “los malos orientales y peores americanos”.

Esos orígenes tiene la burguesía dependiente uruguaya y su brazo armado el militarismo. Creado para obligar al orden social burgués, al “libre comercio” trastocado después en la actual “libertad de empresa”. O sea la libertad para el que tiene de subyugar y obligar a trabajar con el lomo a los que no tienen. ¿Y al que no tiene, o tenía? Pues para ese el palo, el cepo, el remington y la disciplina cuartelera contra sus hermanos, a los que obligaban a reprimir salvajemente. Antes que Patria, Orden. El desdichadamente famoso “Goyo Jeta” hizo pasar por el campo de batalla las caballadas gubernistas para exterminar definitivamente a los vencidos heridos incapaces de protegerse de aquel diluvio de cascos enloquecidos. No menos Goyo fue el moderno que habita en Domingo Arena y contemplaba morir a Luzardo con deleite perverso. Ahora se pelea y así le va sin fusta –por un pedazo de lechón!!!- en la heladera de su cárcel VIP.

Siempre el afán de prepotencia, la angurria no contenida, los apetitos ocultos disfrazados, el asesinato cuando cuadra y la pretensión de no ser jamás responsable de sus actos. Ninguno de casi todos ellos “oficial y caballero”. Miserables de baja estofa la mayoría de todos ellos. Videla el argentino dirige a sus cofrades en la gimnasia y la autodisciplina (tiene pasado católico practicante en los denominados “ejercicios espirituales”). Del otro lado del charco, en el paisito, ambulancias ante cada traslado para dar lástima. De estoicismo (una de las “virtudes” pregonadas)... minga!!!

Recientemente –y ya lo hemos señalado- el comandante en jefe Rosales se preocupaba porque eran jóvenes los que pintaban en las paredes de las instituciones militares. Y eso significa a buen entendedor pocas señales bastan, que no pueden cumplir sus funciones cuando no cuentan con la confianza de una parte importante (y dinámica) de la población. Otras señales son que la “carrera” no atrae a los jóvenes y hay que hacer campañas especiales para ver si se llenan las plazas de las escuelas militares. Otro, que los mismos milicos piden la baja. En resumen una cofradía que ya no tiene nada que ver con el calor y la confianza popular. Y así no pueden hacer “patria”, ni defender la idem y no tienen utilidad pública. En suma, se acaba el curro.

Y hay que encontrar padrinos protectores vengan de donde vengan. ¿Se imagina alguien en el Uruguay a Aparicio Saravia defendiendo a los milicos gubernistas? Por suerte Aparicio esta muerto y en su viejo partido campea un Lacalle Herrera, pero le ha surgido un Eleuterio Fernández, un José “Pepe” Mujica, un Super Ratón, que son sus valederos.

Ayer con “chinitas” y “gauchitos”, con “caballerías” que aportan los estancieros tuvieron su fiestita. Fiestita y festejos. Y meta “patria”. Mujica para no ser menos mencionó que él había andado de “pistola al cinto”. Ah gaucho!!!! Se le olvidó solo recordar que mientras Artigas contrabandeaba y andaba por eso fuera de la ley, él andaba de “ciruja” delinquiendo también… contra los pacíficos floricultores japoneses en tiempos mozos, cuando precisaba un peso. De toda esa carrera del delito lo salvó el viejo MLN-T, porque sino integraría la crónica policial.

El antiguo ciruja, y actual presidente aprovechó la oportunidad para insistir con su caballito de batalla de los últimos tiempos, la manía de andar entreverando los temas y las cosas.

No son los actuales oficiales u egresados futuros de las escuelas los acusados y por tanto no necesitan defensores. Los crímenes del Terrorismo de Estado los cometieron otros oficiales.Y los cometió la cofradía que los agrupa. Así que los acusados son agentes concretos y sus crímenes están en el conocimiento del público. Enlutan casi todas las familias de la población nacional. Esos crímenes son gravísimos y están condenados por los mas altos poderes del propio estado uruguayo. Recientemente los ha recordado un organismo la Corte Interamericana y no hay posibilidad de escape alguno.

El actual gobierno y particularmente el presidente Mujica ha tenido el descuido de no atenderlos como correspondía y estaba obligado. De esa desidia –que políticamente es interesada- de esa responsabilidad incumplida no se sale con mentiras y falsos argumentos. Mujica sabe que eludió funciones, que eludió responsabilidades. Tuvo tiempo de sobra para prever y buscar soluciones. Para luchar denodadamente por las mismas con todo el prestigio que otorga el cargo de Primer Ciudadano ante la audiencia pública. No lo hizo y no vamos a repetir ahora los mismos argumento que esgrimió en su momento y que hoy se olvida. El sabe que miente a sabiendas. Y lo más importante es que lo sabemos todos. Es un grave error creer que el volumen de los altavoces, o las imágenes de las pantallas de televisión van a tapar el hecho de las violaciones, muertes y desapariciones.

Las víctimas y los deudos, estamos aquí y seguiremos luchando. De eso no le quepa la menor duda. Nos mueve la justeza de nuestra causa. Nos estimula la cobardía manifiesta de los imputados. La desidia vergonzosa del gobierno. La complicidad de sus estructuras partidarias, de los falsos líderes de las fracciones que son unos verdaderos traidores a la causa que los llevó a los sitiales que ocupan.

Seguimos con paciencia los altibajos de las situaciones políticas. Marcamos a fuego a los débiles, a los pusilámines a los hipócritas. No nos engañan de ninguna manera. Hacemos y haremos nuestro camino al costado de ellos y pasándoles por arriba cuando el momento de acumulación de fuerzas suficientes llegue.

Nuestra divisa es la misma que Artigas que estampó: “EL DESPOTISMO MILITAR, SERA PRECISAMENTE, ANIQUILADO”. Con serenidad, con la conciencia tranquila, estamos en el camino.

 

 

 

 

 

 

 

 
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